Al hablar de Fotografía callejera inmediatamente nos vienen a la mente grandes maestros como Henri Cartier-Bresson, Harry Callahan, Garry Winogrand, Saul Leiter y tantos otros. Es posible que también salga el nombre de una ilustre (aunque desconocida por completo en vida) Vivian Maier. La historia de la street photography está plagada de hombres que salían a las calles armados con sus cámaras para mostrarnos lo que sucede ante nuestros ojos y no vemos.
Hoy en día hay cada vez más mujeres haciendo fotografía de calle (la proporción en mis cursos ronda el cincuenta por ciento, algo que me hace sentir muy orgulloso), pero cuando echamos la vista atrás podemos comprobar que la historia no ha sido justa con ellas. Así que de vez en cuando hay que tratar de equilibrar un poco la balanza rescatando del olvido a grandes fotógrafas.
Ya te he hablado de Helen Levitt antes (tienes unos cuantos enlaces al final de esta entrada). Sin embargo hoy toca recuperar algunas de sus imágenes más interesantes y comprobar que tenemos mucho que aprender con ellas. Así la neoyorquina se une a una lista de grandes maestros que hasta ahora incluye lecciones de estos genios:
Dado que no sé comunicarme con palabras, me expreso mediante imágenes.
Helen Levitt.
Qué podemos aprender de Helen Levitt
1. Busca la belleza en el día a día
Levitt capturó momentos de enorme belleza en las calles de su Nueva York natal. Muchas de sus fotografías conservan para siempre esa magia efímera que ocurre en ciudades y pueblos. Solo hay que estar dispuesto a verla y practicar y practicar hasta ser capaz de congelarla en imágenes.




Oportunidad
La veamos o no a nuestro alrededor tienen lugar pequeños acontecimientos llenos de poesía y belleza. Es posible que solo duren un instante, pero eso no vale para dejarlos pasar, al contrario; es un motivo más para inmortalizarlos, si no lo hacemos desaparecerán para siempre.
Permanece atento y preparado. Lo primero puedes hacerlo hoy mismo, lo segundo depende de tu dominio de la técnica y la cámara. Practica todo lo que puedas de forma consciente: proponte resultados concretos, inténtalo, analiza lo que has hecho, aprende y vuelve a empezar. Con el tiempo acabarás desarrollando una habilidad que te permitirá disparar prácticamente sin pensar. Si necesitas ayuda con los mejores ajustes para Fotografía callejera, prueba con estos.
Sería equivocado suponer que algo de la mejor Fotografía proviene del intelecto; es como cualquier arte, esencialmente el resultado de un proceso intuitivo, se basa en lo que el artista siente y no en lo que piensa, mucho menos en aquello sobre lo que teoriza.
Helen Levitt.
2. Convierte lo ordinario en extraordinario
De la misma manera que era capaz de captar la belleza, Levitt también creaba imágenes en las que eventos banales se transformaban en situaciones extraordinarias. Pulsando el botón de su Leica en el instante preciso lograba convertir la realidad en otra cosa mucho más interesante.




Oportunidad
Nuestra cámara capta la luz en fracciones de segundo, desde décimas a milésimas. De esa manera puede atrapar instantes que en la sucesión de eventos del día nos parecen completamente normales pero que, aislados (y eso es lo que hace una foto: aislar un instante de todos los demás) pueden dejarnos con los ojos como platos.
Búscalos. Extráelos.
3. Hazte con un tema (o con varios)
Mientras enseñaba a niños en la década de los treinta, Levitt descubrió sus dibujos de tiza y comenzó a registrarlos. Eso la llevó a fotografiar a los propios niños y de ahí a hacer Fotografía callejera en el sentido más amplio del término, aprovechando que la gente pasaba prácticamente todo el día en la calle en los meses más calurosos.
Durante todo ese tiempo los niños siguieron siendo uno de sus motivos favoritos, en muchas de sus imágenes la complicidad entre ellos y la fotógrafa es evidente.





Oportunidad
No tienen por qué ser los niños ni un colectivo concreto (lamentablemente la Fotografía con cámara se ha convertido en sospechosa) pero puede ser buena idea mantener el interés en un determinado tema durante el tiempo suficiente.
Nunca sabes dónde te puede llevar y podría acabar siendo una serie o un proyecto interesantes (si vas a lanzarte a hacer algo así echa un vistazo a este magnífico libro para aprender a hacer proyectos). Además si eliges un tema que puedes encontrar en la calle a menudo se convertirá en un buen pretexto para agarrar la cámara y salir con ella.
4. Usa el encuadre de forma inteligente
Helen Levitt tiene muchas (muchas) fotografías encuadradas de manera vertical. Esa orientación nunca es caprichosa sino todo lo contrario: contribuye a potenciar lo que sucede dentro del marco, ya sea el movimiento de un niño encaramado a una pared, la altura a la que se sube un grupo al jugar o la figura erguida de una mujer vestida de colores entre paredes de color.





Oportunidad
Cómo encuadras es una decisión más y con ella puedes cambiar el mensaje de tus imágenes. Si aquello que fotografías es eminentemente vertical, encuadrar de esa manera hará que esa dimensión prevalezca sobre la horizontal (y al revés).
Piensa qué encuadre “encaja” mejor con lo que estás a punto de fotografiar antes de pulsar el botón de disparo. Si tienes dudas y tiempo, prueba a hacerlo tanto en horizontal como en vertical y decide después frente a la pantalla de tu ordenador (mejor no hagas chimping, o te perderás fotos).
5. Interésate por los demás
Las fotografías de la neoyorquina transmiten compasión y curiosidad por los demás. Hay ahí un interés genuino por el otro que se plasma en imágenes plenas de empatía, respeto y humanidad (a ambos lados de la cámara).





Oportunidad
Nos cruzamos a diario con cientos, miles de personas de las que no sabemos absolutamente nada. Todas con virtudes y defectos, miedos, anhelos, derrotas, victorias y contradicciones a sus espaldas, exactamente igual que nosotros mismos.
Dicho de otra forma: ante nuestra cámara se suceden sin parar cientos y miles de historias que podría valer la pena contar.
6. Espera al gesto
Ese interés por los demás se plasma en muchas fotos de Levitt en gestos que cambian por completo su significado. De nuevo apenas fracciones de segundo, de nuevo algo maravilloso.





Oportunidad
Una mirada, un movimiento con la mano, una determinada actitud o una carcajada incontrolable convierten una fotografía en algo completamente distinto y mejor: algo que podemos y deseamos interpretar y con lo que conectamos.
Estudia a la gente y fíjate en esos gestos casi imperceptibles pero tremendamente significativos. Aprende a reconocerlos y a adelantarte a ellos.
7. La calle no son solo personas (documenta lo efímero)
Helen Levitt construyó un gran archivo de dibujos a tiza que con toda seguridad desaparecieron minutos u horas después de que disparase. Así convirtió algo efímero en eterno.




Oportunidad
Hay quien no concibe la Fotografía callejera sin personas. No es mi caso, de modo que te diré que ahí fuera hay muchas más cosas que fotografiar. Puede ser la luz, las sombras, la geometría, las ropas, los reflejos… Y todo aquello que se te ocurra (las posibilidades son virtualmente infinitas).
Además no tienes por qué elegir, todo está ahí y solo tú decides qué merece ser convertido en una imagen y qué no.
8. Haznos sonreír
Muchas de mis primeras imágenes son, creo, bastante divertidas. Y estos días tiendo a buscar la comedia más y más.
Helen Levitt.



Oportunidad
Puedes buscar la poesía, la belleza, la reflexión, la crítica y mil cosas más, pero no deberías renunciar al sentido del humor. Hazlo desde el respeto y conseguirás que riamos contigo.
9. No tienes que irte a ningún sitio
Helen Levitt fotografió toda su vida en Nueva York, ampliando cada vez más su radio de acción y plasmando la vida en sus calles a lo largo de décadas. Más allá de su innegable valor fotográfico y estético, su trabajo tiene también un gran peso documental.





Oportunidad
Posiblemente Nueva York sea la ciudad más fotografiada del mundo y sin duda es una de las que más oportunidades ofrece a los amantes de la street photography. Sus calles están plagadas de personajes interesante y la vida se desarrolla a un ritmo frenético, con pequeñas historias aquí y allá, a todas horas del día y de la noche. Pero no todo el mundo que ha fotografiado en Nueva York ha conseguido las imágenes que Levitt sí veía.
Así que no se trata solo del lugar sino sobre todo de la mirada. Es difícil hacer fotos interesantes en el lugar donde vivimos y por el que caminamos a diario, pero eso no puede ser un pretexto para dejar de intentarlo.
Recursos sobre Helen Levitt
Libros
- Lírica Urbana (aquí la reseña sobre este libro en el blog).
- One Two Three More.
- Manhattan Transit.
- Photographs.
Enlaces
- Entrada sobre la vida y obra de Levitt.
- Análisis en profundidad de la fotografía de la mujer del abrigo de pieles.
Esto es todo lo que he aprendido de Helen Levitt, una de las fotógrafas de calle más importantes de la historia, y mucho menos conocida de lo que debería. Tanto que se decía de ella que era “la fotógrafa más admirada y menos conocida de su tiempo”. Ojalá esta entrada contribuya a que más gente descubra su mirada.
Espero te haya parecido interesante, si es así cuéntame tus impresiones a través de los comentarios.
Gracias por leerme y por compartir esta entrada en tus redes.
Jota.
Yo sólo diré tres cosas:
-Algunas de las fotos son enormes.
-Se atrevió con el color pero creo que no llegó a encontrar el punto. No hay diferencia con el blanco y negro. Prima sobretodo el momento. A mí ya me esta bien.
-Las mujeres fotografían distinto que los hombres. Pero cuando hay niños o ancianos por medio la sensación es más acusada.
-Sabemos que debido a un robo se ha perdido la mitad del material de Levitt. No quiero ni pensar la de joyas que nos hemos perdido. Es una pequeña tragedia.
Lo he escrito mal, no quería decir “algunas de las fotos”; quería decir la mayoría de las fotos. Es increíble el trabajo de esta mujer.
Amén a eso. Sí. La gran mayoría son magníficas. Y es increíble.
Jota.
Guau, Gerard. Este comentario es oro. Gracias por él!
Jota.
Me topé con este artículo sin pensar que me sentiría identificada. Los puntos que tocas en las oportunidades me parecen valiosos. Poco a poco he ido practicándome mas la fotografía y siento que ya no disparo a todo sino que pienso en aquello que quiero capturar o que me sorprende. La idea está en disfrutarlo. También es cierto que me pongo excusas para no fotografiar y mi zona es tan rica visualmente que siento que no lo estoy aprovechando. Te agradezco por este artículo y lo compartiré en mi blog.
Hola Laura! Me encanta haber escrito algo que te resulte interesante, y sobre todo con lo que puedas identificarte. Gracias por tu comentario y por compartir la entrada en tu blog, es un honor!
Un saludo.
Jota.