Si un día leíste por aquí los 10 mandamientos de la fotografía quizás esperabas encontrarte con esta entrada. Sin embargo a mi no se me había ocurrido escribir algo así hasta que intercambié unos comentarios a través de Facebook con Iván y sus amigos, hace algunas semanas. Entonces tomé un par de notas y acabé elaborando una lista que contiene los que, a mi juicio, son los peores “pecados” en los que puedes caer a la hora de hacer fotos.
Hay más, claro. Pero yo diría que estos son los que pueden hacer que te pierdas irremisiblemente y acabes en el “infierno fotográfico”. ;-)
Los pecados capitales de la Fotografía
1. Confundir buen tema con buena fotografía
Nos pasa a muchos y continuamente. A veces la temática es tan potente que tendemos a pensar que eso basta para construir una buena imagen. Te puede suceder durante un viaje a un lugar completamente distinto al tuyo, retratando a una persona con magnetismo o mientras vives un acontecimiento especial, ya sea una fiesta o un situación llamativa. Pero una cosa es qué fotografías y otra cómo lo haces. Hoy en día, con un sólo click, podemos ver imágenes de grandes fotógrafos tomadas en entornos espectaculares o ante personas interesantes, eso nos inclina a pensar que esas obras son buenas porque el tema nos atrae, y lo que es peor, que basta un buen tema para hacer una buena fotografía. Por eso cuando nos encontramos ante algo que nos atrae es muy fácil pensar que simplemente con captarlo en nuestro sensor nos vamos a llevar algo bueno. Y así nos dejamos allí una oportunidad y nos llevamos una postal, una mala imagen de un buen tema.
Un día oí a Dani me mostró varios trabajos; algunos resultaban sosos y sin interés, sin embargo otros me enamoraron.
Tú decides el tema que fotografías y cómo lo haces, qué sacas de él y a dónde lo quieres llevar. Pero no caigas en la tentación de creer que sólo por encontrar algo interesante eso va a convertir tu trabajo en memorable.
2. Desperdiciar el tiempo en el cuarto oscuro (digital y analógico)
El software de tratamiento de imágenes (y hasta donde yo sé el laboratorio fotográfico) puede ayudarte a convertir una buena imagen en una gran imagen. No es algo que haya aparecido con los ordenadores y Photoshop, se ha hecho desde siempre también en fotografía analógica. Con lo digital han cambiado las herramientas y las posibilidades han aumentado exponencialmente hasta el punto de que podemos hacer cosas impensables años atrás. Pero que podamos no quiere decir que debamos. Dominar o al menos conocer qué se puede aplicar para mejorar nuestras fotografías no significa que todas merezcan el esfuerzo.
Si partes de una mala imagen puedes llegar a tener una imagen efectista. ¿No es mejor dedicar ese tiempo sólo a las realmente buenas, para así conseguir imágenes efectivas? Dedica tiempo a mejorar las imágenes que ya son buenas cuando las ves tal y como salen de tu cámara, no pierdas el tiempo con las demás y aprovéchalo para hacer más fotografías que valgan la pena.
3. Amar la herramienta por encima del resultado
A todos nos gustan las cámaras. A las marcas les gusta que nos gusten las cámaras, y los objetivos, y los accesorios, y la última tarjeta súper veloz, y… ¿Para qué sirve todo eso? Para hacer fotos. La cámara (y todo lo demás) es la herramienta, sólo la herramienta. Es imprescindible, claro, además para hacer determinadas fotografías necesitas un determinado equipo, pero no pierdas de vista el objetivo: todo esto va de hacer imágenes y de disfrutar de ellas. Hazte con un equipo, acostúmbrate a él hasta el punto de que no tengas casi ni que pensar y empieza a crear cuanto antes. Con el tiempo irás descubriendo qué es lo que mejor se adapta a ti y a tu estilo, pero eso debería ser consecuencia de tus fotos, y no justo al revés.
Llena tu cabeza de imágenes, no de especificaciones.
4. Conformarse
Repetir siempre la misma fórmula es un pasaporte hacia el estancamiento y el aburrimiento (y no sólo el tuyo…). No te conformes con lo que crees que haces bien, seguro que puedes mejorarlo. No hagas esa foto como la hace todo el mundo, no la hagas como la habrías hecho hace un año. Exprime al máximo las escenas buscando distintos puntos de vista, camina mucho y piensa aún más. Si te has llevado la cámara al ojo para hacer una foto es porque ahí hay algo que te ha llamado la atención, pero no tiene por qué ser obvio, ni fácil. Encuadra a todas horas, aunque no tengas tu cámara contigo. Encuentra un tema que te apasione y desarróllalo durante un tiempo de manera constante. No te pongas excusas para no coger la cámara.
Esfuérzate más. ¿No te gusta la Fotografía? Demuéstratelo.
5. Acercarse demasiado
Sí, yo también conozco la frase de Robert Capa. ;-) Me refiero a otro tipo de distancia: la que que hay que interponer entre nuestras fotografías y nosotros mismos. Cuando ves tus fotografías tu cabeza recuerda demasiadas cosas, eso hace que pienses en mucho más de lo que hay en el encuadre. Los demás no tienen toda esa información, sólo disponen de la que has dejado dentro del marco, por eso tienes que intentar contemplarlas “desde fuera”. Es algo tan difícil como necesario, pero hay formas de hacerlo.
6. Creer que ya lo sabes todo
Pensar que lo sabemos todo sería el mayor de estos pecados si no hubiese un número 7. A lo mejor no es más que otra forma de pereza, porque en el fondo podría ahorrarnos muchos esfuerzos: digerir las críticas, abrirnos a los demás y aprender incluso de aquellos que saben menos, ayudar con nuestros conocimientos (que quizás no sean tan extensos como queremos creer) a que otros crezcan y mejoren… He tenido la suerte de coincidir en alguna ocasión con grandes fotógrafos y siempre me ha sorprendido su humildad y cercanía, y con qué naturalidad comparten sus experiencias, sin reservas.
Los buenos de verdad no creen que lo saben todo pero comparten todo lo que saben.
7. Aburrirse
Sé que estoy tirando del mandamiento número 10 pero es que, al final, si no te diviertes corres el riesgo de cometer todos los demás pecados, del 1 al 6. Si no sientes ese deseo irrefrenable de coger tu cámara y salir a buscar fotografías todo esto no vale para nada. Es perfectamente normal tener épocas en las que estás menos inspirado, aprovéchalas para hacer eso que no puedes hacer mientras estás creando imágenes: ve buenos libros de Fotografía, repasa tus apuntes o hazte con unos, investiga a fondo un fotógrafo por el que te sientas atraído, charla con un colega, ve a ver una exposición…
Verás como la chispa vuelve a saltar. Cuando suceda, no te resistas; sal a hacer fotos. Concéntrate en disfrutar del proceso, no busques a todas horas imágenes magníficas e impactantes o un mensaje. Si te diviertes, todo eso acabará por llegar tarde o temprano.
Si te apetece recibir un aviso en tu correo electrónico cada vez que publique una entrada, basta con anotar tu dirección en esa casilla de la izquierda. Si además quieres mantener el contacto a través de otros canales, nada más fácil:
- @rubixephoto en Twiter
- jotaemebede en Pinterest
- Jota Barros en Facebook (he habilitado la opción “Suscribirse” para que puedas estar al tanto de las publicaciones sin necesidad de estar conectados)
- Jota en G+.
- Y, claro, mi correo: rubixephoto@gmail.com
Gracias por pasarte. Nos leemos!
Gran artículo Jota, estoy seguro de que todos hemos caído en algunos de los pecados en nuestras diferentes etapas como fotógrafos, yo suelo ser reincidente en el de amar la herramienta, es que las quiero tanto jajajaj pero luego se me pasa cuando salgo a fotografiar ;)
Un abrazote
Gracias Iván. Supongo que forman parte del proceso de aprendizaje… Lo importante es reconocerlos y sobreponerse a ellos. No crees?
Gracias!
Jota.
Muy buen articulo. sobretodo comparto lo de no querer la cámara en cima de todo. Veo muchos fotógrafos que presumen mas de sus objetivos ( como si de sus falos se tratara) que de sus fotos. Muy buen blog. Lo seguiré.
Muy agradecido Domenico! A veces tendemos a confundir herramientas con resultado, eso tiene un riesgo muy claro de pasar demasiado tiempo hablando de equipo y menos de lo importante, las imágenes.
Me alegra que te guste el blog. :)
Un saludo.
Jota.
Hola Jota, excelente artículo, como para tenerlo en la cabecera, es una dicha el haberte encontrado, gracias por existir. Disfruto mucho con lo que haces un fuerte abrazo.
Muchísimas gracias Hugo!
Eres muy amable, me emociona saber que lo que hago conecta tanto con vosotros ahí, al otro lado de la pantalla… :)
Gracias por pasarte por aquí y comentar. Por cierto, has visto el libro gratuito que puedes descargarte? He pensado que te podría gustar:
https://jotabarros.com/libro-de-fotografia-ve-mas-alla-del-modo-auto/
Saludos!
Jota.