Mientras Sebastião Salgado se entregaba a uno de sus proyectos más reconocidos (Trabajadores, sobre la desaparición de los trabajos manuales) fue consciente de que los grandes cambios económicos, las guerras y la inestabilidad política en determinadas regiones tenían como consecuencia el desplazamiento de grandes cantidades de seres humanos que buscaban una vida mejor.
Esa fue la semilla de Éxodos, editado por primera vez en 1999 y reeditado ahora. Un libro resultado de más de 6 años de trabajo con el inconfundible sello y la calidad a la que nos tiene acostumbrados el fotógrafo brasileño, que no sólo resiste a la perfección el paso del tiempo sino que se mantiene más vigente que nunca.
Estructura y forma
Si has tenido en las manos otros trabajos de Salgado las dimensiones de Éxodos no te sorprenderán: es un libro de un tamaño considerable (25 x 33 centímetros y 432 páginas) que tendrás que desplegar sobre una mesa o una superficie similar para disfrutar de él.
Como sucede con algunos otros clásicos con dimensiones parecidas, cada centímetro cobra todo el sentido del mundo al abrir el libro por una fotografía a doble página y recrearte en todos sus detalles. Si hasta entonces te había parecido un libro difícil de manejar coincidirás conmigo en que el tamaño está más que justificado.
El libro se abre con un nuevo prólogo de Sebastião Salgado al que le siguen dos textos incluidos en la primera edición a cargo de él y de Lélia Wanick Salgado, su esposa y la directora de Amazonas Images, la agencia dedicada por completo a difundir la obra del fotógrafo.
Tras esos textos hay un par de páginas que adelantan la organización de las imágenes. Éstas se dividen en cuatro grandes bloques: Emigrantes y Refugiados, África, América Latina y Asia, cada parte viene explicada con un breve resumen de los sucesos históricos que explican las consecuencias documentadas por Salgado.
A partir de ahí las fotografías se muestran solas, sin texto alguno y sólo acompañadas del número de página que nos permite localizar la información relacionada en un cuaderno separado del libro (eso facilita ampliar los detalles sin necesidad de ir continuamente al final del volumen y sin que las palabras “empañen” la lectura del trabajo fotográfico).
Contenidos
Los textos firmados por Salgado evidencian que las cosas no han cambiado sensiblemente desde que inició este proyecto allá por los primeros años noventa. Los más débiles siguen sufriendo las consecuencias de las decisiones de unos pocos, y su instinto de supervivencia les empuja a buscar un futuro mejor (un futuro, en definitiva) lejos de su hogar, así se embarcan en odiseas de miles de kilómetros en los que arriesgan (y a menudo pierden) la vida .
Un fenómeno global como ese merecía un proyecto global como Éxodos: el fotógrafo visitó 40 países azotados por guerras, hambrunas, epidemias o simplemente la más absoluta pobreza para documentar las condiciones en las que millones de personas tienen que sobrevivir. Cuenta Salgado que el trabajo ha influido definitivamente en su opinión sobre la humanidad y su futuro.
El prólogo original ahonda en las circunstancias de cada región fotografiada y ayuda a entender las tragedia que sucede en ella.
Casi siempre, los refugiados tienen poco que decir en los conflictos políticos, étnicos o religiosos que desembocan en tantas atrocidades. ¿Cómo se puede consolar a quien ha conocido lo peor del género humano?
Sebastião Salgado
El texto a cargo de Lélia es sobre todo una sucesión de agradecimientos a los colaboradores del proyecto pero a la vez supone un vistazo al proceso de planificación, financiación y desarrollo de aquel. Permite hacerse una (mínima) idea de la complejidad que supone llevar a cabo un trabajo de esta magnitud.
Aún con toda la información que acompaña a las fotografías estas son, claro, las grandes protagonistas del libro. Fieles al estilo de Salgado son imágenes en blanco y negro magníficamente impresas sobre un papel no del todo blanco y siempre rodeadas de un margen. En cada doble página hay de 1 a 4 capturas, tanto horizontales como verticales.
Todas y cada una de las fotografías funcionan por sí mismas, y eso es mucho decir en un libro en el que hay varios cientos. También hablan por sí solas sin necesidad de saber exactamente dónde y cuándo han sido hechas, pero aún así es difícil resistir la tentación de tener a mano el cuaderno para buscar el número de página y conocer la historia de sus protagonistas. Ese folleto es un trabajo de documentación apabullante en el que se indica, además de la fecha y el lugar de la toma, las circunstancia de la región (también los hechos históricos) y de los seres humanos que aparecen en ella.
Encontramos el tipo de fotografía con el que todos identificamos ya a Sebastião Salgado, imágenes reposadas y casi monumentales (que normalmente se muestran a doble página), junto a ellas hay otras que capturan momentos más íntimos e individuales, al más puro estilo de un fotorreportero clásico (no olvidemos que el brasileño empezó como fotoperiodista).
Al final, todas ellas nos cuentan una historia que desgraciadamente se repite en muchos lugares del mundo: vidas en una especie de limbo que unas veces tiene la forma de un viaje que parece eterno y otras significa despertarse cada día en un espacio provisional que nunca llega a ser un hogar de verdad, estable y seguro.
Aunque documenta la lucha por la supervivencia y denuncia el modelo de desarrollo por el que nuestra especie ha apostado a pesar de las terribles consecuencias que tiene para millones de personas, Éxodos también es una bella muestra de la capacidad del ser humano para mantener la dignidad frente a las peores circunstancias, para seguir adelante y luchar por una vida mejor aunque haya que buscarla lejos de donde se ha nacido y signifique arriesgarlo literalmente todo.
En definitiva
Una vez más Salgado dirige su cámara hacia los más desfavorecidos para que los veamos frente a frente y no podamos decir que no sabemos. Así construye un magnífico libro de Fotografía que transmite un mensaje muy claro: ¿tiene sentido mantener un sistema que causa tanto sufrimiento a tanta gente?
A la vez, en cierta medida este trabajo nos recuerda que mientras no cambiemos nuestras prioridades y con ellas la forma en que funciona nuestro mundo, nadie está realmente a salvo de pagar el precio.
Para saber más
Título: Éxodos.
Autor: Sebastião Salgado.
Editorial: Taschen.
Año de publicación: 2016 (reedición actualizada de la original de 1999).
En una frase: Salgado desarrolla un trabajo descomunal sobre las consecuencias del mal llamado desarrollo a base de imágenes fabulosas.
Dónde conseguirlo: Compra tu ejemplar de Éxodos en este enlace (con sólo un par de clics).
Bonus: esta es la página de la agencia Amazonas Images, dirigida por Lélia y dedicada a difundir el trabajo de Salgado.
Otras grandes obras que no deberías perderte:
- Minutes to Midnight, Trent Parke
- Gitanos, Koudelka
- Los Inconformistas, Martin Parr y Susie Parr
- William Eggleston´s Guide
- Nicaragua, Susan Meiselas
- Trinity, Carl de Keyzer
- The Decisive Moment, Henri Cartier-Bresson
- The Americans, Robert Frank
Todos los libros que han pasado por el blog están en el apartado de recomendaciones.
¿Qué te parece Éxodos? ¿Conoces el trabajo de Salgado? ¿Te gusta? Cuéntame tus impresiones en los comentarios, me encantará saber qué opinas. Si te ha gustado la entrada, compártela en tus redes para que otros también puedan leerla (gracias!).
Hoy no es día de libros, ha muerto Marc Riboud.
Un día triste para la comunidad de fotógrafos.
Sin duda estamos de acuerdo, Lucas. Es un día triste, se ha ido uno de los grandes…
Saludos.
Jota.
Hola Lucas. Tienes toda la razón, se ha ido uno de los grandes…
Saludos.
Jota.