
La Fotografía de calle va sobre todo de caminar. De vagar con la cámara en las manos completamente atento a lo que ves para así verlo de otra manera. En ocasiones tienes que moverte rápidamente para reaccionar a tiempo y capturar un instante que no va a volver a repetirse y otras veces el juego consiste en detectar el potencial de un rincón y esperar a que suceda algo que lo convierta en una imagen interesante.
Ya sabes qué se dice de los que hacemos street photography: a veces somos cazadores y a veces pescadores.
Como le contaba a Sandra Vallaure en intuición, la única herramienta que tenemos para tomar decisiones al fotografiar en el espacio público.
Hace poco estuve en Asilah, una localidad terriblemente fotogénica en el norte de Marruecos. De allí me traje algunas imágenes que me gustan, una de ellas fue cuestión de paciencia (algo que no me sobra precisamente), y voy a contarte cómo pasó desde antes de apretar el botón de disparo hasta el final, proceso de revelado incluido. Claro.
La imagen
Ajustes de cámara y técnica
Las calles de Asilah están en su mayoría pintadas de blanco, lo que hace que en días soleados brillen de manera espectacular. Al fotómetro de nuestra cámara no le gustan los entornos especialmente brillantes porque le confunden, así que compenso la exposición en +1EV para evitar que las paredes salgan grises (en esta entrada te cuento qué sucede y por qué la solución es compensar la exposición).
El resto de ajustes de mi cámara son los habituales: modo prioridad a la apertura con un diafragma f/8 e ISO 400 (no llevo la sensibilidad al mínimo porque esa luz tan intensa genera también sombras oscuras en las calles no iluminadas). Llevo montado un objetivo de 55mm 1.8 (¿te he dicho por qué me encantan los objetivos fijos aunque a veces nos limiten?).
Composición
Camino entre las casas blancas un poco aturdido por la belleza de Asilah (que por cierto quiere decir “arcilla”), tratando de ver fotos aunque todo es tan bonito que no sé dónde fijarme. Al avanzar por una calle pintada de azul y blanco veo una pareja de japoneses (cómo no) haciendo una fotografía hacia el lugar del que vengo. Miro hacia atrás y automáticamente, a pesar de toda la gente, ese rincón entre las paredes y con la ventana naranja me atrapa.
Decido hacer mi propia versión de la imagen. Me la imagino con una única persona cruzando de un lado a otro, en lugar de avanzar hacia la esquina en la que me coloco.
De repente la gente desaparece. Vale, ese lugar es muy fotogénico pero sin nadie resulta soso. Me aseguro de que todos los ajustes están bien, encuadro apoyándome en una pared y espero.
Nadie.
Espero un poco más.
Nadie. En este punto de no tratarse de un lugar tan especial seguramente ya me hubiese ido.
Espero.
Nadie. Ni siquiera oigo voces. ¿Cómo puede ser si hace un momento la calle estaba repleta de personas?
Espero un poco más. Me impaciento. Pienso en dejarlo estar. Venga no, un poco más.
Nadie.
Y entonces, justo cuando estoy a punto de tirar la toalla aparece una mujer. Y está sola. Y mira a cámara.
Clic.
Revelado del negativo digital
Esta es la foto tal y como salió de la cámara (es el archivo RAW convertido a JPEG sin ajuste alguno):
Y aquí tienes la imagen abierta en Adobe Photoshop Lightroom Classic (te he contado cómo puedes instalar ese programa desde cero o actualizarlo paso a paso), esa mancha roja que ves en la parte superior izquierda son las altas luces quemadas, es decir, las zonas tan expuestas que han perdido detalle (el aviso se activa pulsado la tecla “J” en el módulo Revelar).
Veremos cómo solucionarlo un poco más abajo, antes quizás quieras echar un vistazo a este video de menos de un minuto en el que te cuento qué es el histograma y cómo puedes usarlo para detectar ese tipo de problemas.
Tal y como te cuento en el videotutorial de revelado de fotografías con Adobe Lightroom el proceso comienza minimizando las distracciones. En este caso la imagen está ligeramente caída hacia la izquierda, lo que se arregla con la herramienta recorte (R):
A partir de ese momento ya podemos hacer los ajustes globales (se llaman así porque afectan a toda la imagen). En este caso reduzco ligeramente la Exposición (-0,12) y aumento Contraste (+6), bajo las Altas luces hasta que la mancha roja de la que hablaba arriba desaparece (es necesario llegar hasta -62), oscurezco ligeramente las sombras (-21) y aumento Claridad (+10) y Saturación (+16):
Hora de aplicar una Curva de tonos, aunque es posible personalizarla con más puntos y formas más complicadas, tiendo a usar el preajuste “Contraste medio”:
Hay un par de colores que destacan en la imagen, así que aumento su saturación en el panel HSL / Color / Blanco y negro:
Ahora vienen los ajustes locales, ya sabes, esos que solo afectan a zonas localizadas de la fotografía. Para hacerlos recurro al Pincel de ajuste y con él aplico cambios a partes aisladas. El primero es para la sombra sobre la pared de la izquierda (Exposición -0,08 y Contraste 22):
El siguiente es para oscurecer la zona azul de la parte superior del encuadre (-0,59 de Exposición):
Otro para aclarar la pared tras la chica y aumentar ligeramente su contraste (Exposición +0,40, Contraste +14)
Y como último Pincel de ajuste, dado que queremos que la cara de la mujer destaque pintamos únicamente sobre ella y aumentamos ligeramente la Exposición (hasta +0,55) y el Contraste (+10).
Ten en cuenta que tendemos a fijarnos más en las partes más brillantes de la foto, por eso aclaramos aquellas que queremos que atrapen y oscurecemos las que no deben tener protagonismo.
Hace relativamente poco he empezado a usar el Filtro radial para concentrar la atención en la parte más relevante de la imagen. En esta lo aplico en torno a la chica y aumento la Exposición ligeramente: +0,20.
Acabo aplicando un ligero enfoque en el panel Detalle (aquí tienes otro video explicando los dos tipos de enfoque que tenemos que usar en nuestras fotografías digitales):
Y así llegamos al resultado final, que ya solo tenemos que exportar siguiendo unos pasos muy sencillos:
Hasta aquí el proceso completo de una fotografía de calle, desde la idea al resultado definitivo, pasando por su revelado con Adobe Photoshop Lightroom. Espero que te haya resultado interesante. Dime, ¿cambiarías algo en la toma o en el procesado? ¿Me he dejado algo fuera? ¿Te surge alguna duda? Ahí tienes los comentarios, son tuyos y me encantará leerte.
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