Pulsa en la imagen de arriba para adentrarte en la vida de Julie. No será un viaje fácil, pero la Fotografía también está ahí para cuando decides mirar hacia lo que normalmente no vemos.
Darcy Padilla conoció a Julie Baird en el lobby del Hotel Ambassador, en San Francisco. Estaba descalza y llevaba en brazos un bebé de sólo 8 días. Vivía sumida en la pobreza y había contraído el virus VIH de su actual pareja, a la que abandonaría unos meses después para tratar de dejar las drogas, sin éxito. Su (no) niñez había discurrido en un ambiente alcoholismo y abusos sexuales.
Darcy se embarca entonces en el proyecto de documentar la durísima existencia de Julie durante dieciocho años, una vida que acabará a miles de kilómetros, en los bosques de Alaska, alejada de todos sus hijos excepto de la pequeña Elyssa, la sexta. Tras su muerte la fotógrafa se jura contar su historia, no sólo para mostrar la realidad de millones de personas que pasan por infiernos como el suyo sino también para que, algún día, los hijos de Julie sepan por qué fueron dados en adopción.
José Manuel Navia). Ha sido premiada, entre otros, con una beca de la John Simon Guggenheim Memorial Foundation y con el World Press Photo. Vale mucho la pena ver sus otros trabajos, disponibles en su web.
Fuentes:
Web de Darcy Padilla. Aunque fue Radio 3, en su programa “Hoy Empieza Todo”, la que me puso sobre la pista de este trabajo hace algunos meses (lamentablemente no he conseguido localizar el podcast de la emisión).
Me ha interesado mucho este post porque me estoy adentrando un poco en el mundo de la fotografía (street photography, retrato) y me doy cuenta de que no me interesa en exceso la fotografía para recrear “cosas bonitas”, estéticamente tranquilizadoras… Veo que la fotografía documental es una posible salida a este sentimiento de insatisfacción ante las “fotos perfectas y bonitas”. Me alegro que haya personas que sientan de manera parecida. Muchas gracias por darme a conocer el trabajo de Darcy Padilla sobre Julie.
Hola José Luis, me alegra mucho que te haya gustado la entrada.
Repecto a lo que cuentas, no es extraño que la fotografía atraiga en un primer momento por su capacidad para captar la belleza y que, a medida que pasa el tiempo, acabe atrapando por sus otras fortalezas, como la de transmitir mensajes muy potentes sobre temáticas menos “estéticas” pero igual o más potentes y trascendentales.
Será un placer contar con tus visitas por aquí.
Por cierto, te dejo aquí un enlace a una entrada en la que hay una pequeña lista de sitios interesantes, quizás te apetezca echarle un vistazo. :)
https://jotabarros.com/2013/11/06/aprendiende-fotografia-con-los-grandes/
Saludos.
Jota.