Si llevas tiempo visitando el blog ya sabes cómo funciona #misiónrubixephoto: más o menos una vez al mes proponemos un tema para que subas una fotografía de calle relacionada con él, tras un par de semanas se cierra la recepción de imágenes y comienza la revisión, finalmente publico un post en el que destaco un máximo de 5 fotografías finalistas de entre las que selecciono la imagen (en mi opinión) más acertada.
El autor de esa imagen final elige el motivo del siguiente reto y todo vuelve a comenzar. En #misiónrubixephoto 013, dedicada al tema “Azul”, la fotografía destacada fue obra de Marta C. Dehesa (aquí puedes ver la entrada con su imagen y las otras 4 finalistas) y nos propuso un tema que curiosamente no habíamos abordado aún: el “Instante Decisivo” que erróneamente se atribuye a Henri Cartier-Bresson (aunque sus imágenes sí buscaban ese punto álgido compositivo el término no fue acuñado por él, como aprendimos en este pequeño gran libro).
Te diré la verdad, aunque el tema me pareció una gran idea desde el principio, me temía que en el álbum correspondiente sólo fuésemos a ver clichés. Me equivocaba, al revisar las imágenes para seleccionar las finalistas me acabé topando con una buena colección de fotos que habían sabido sacar punta al tema propuesto. Bravo.
Antes de cerrar la #misiónrubixephoto 014, dame un segundo para invitarte a formar parte del grupo público en Facebook (ya superamos el millar de miembros y para unirte sólo tienes que solicitarlo aquí) y a revisar los álbumes de los retos anteriores, en ellos hay mucho y muy bueno que ver.
Selección inicial
Aquí van las cinco imágenes finalistas de #misiónrubixephoto 014: “Instante Decisivo”. Como siempre están en estricto orden alfabético y acompañadas por una breve explicación de por qué me he quedado con ellas.

Nuestro día a día, seamos conscientes o no, está lleno de pequeños momentos que sólo duran unos instantes y que encierran una belleza difícil de expresar. Sólo si estás atento y preparado puedes congelarlos en imágenes tan sugerentes como la de Alberte, haciéndolos eternos. Pero esta foto no es sólo el momento, los colores y las sombras profundas contribuyen definitivamente a su aspecto.
La belleza oculta en una fracción de segundo.

De la misma forma a nuestro alrededor suceden sin parar cosas que, extraídas de su contexto (una foto aislada visualizada por quien no estaba allí siempre está fuera del contexto en el que fue hecha), pueden sugerir cosas muy diferentes según quién las vea. ¿Qué está pasando en la foto de Ariadna? ¿A qué se deben el gesto y la mirada del hombre de la derecha?
Siento debilidad por las fotos que me plantean preguntas. Y esta es una de esas, no cabe duda.

Sugerir y no mostrarlo todo es una de las máximas más repetidas para lograr imágenes impactantes. Pero claro, es mucho más fácil decirlo que hacerlo bien. ¿Hasta dónde podemos suprimir sin que la imagen pierda atractivo? Bueno, pues ahora mira la foto de Daniel, cuentas con los elementos justos para que sepas que está sucediendo sin que te sobre absolutamente nada. Y además la composición es magnífica.
Veo lo que sucede, y me puedo imaginar lo que no veo. También es mucho más fácil decirlo que conseguirlo.

Profundidad a causa del hombre en primer plano, las diagonales hacia la derecha y la figura del niño más pequeña justo en el otro extremo del encuadre, una paleta reducida de colores armoniosos y la sensación de estar allí mismo, viviendo la escena.
La foto de Javier tiene un montón de elementos atractivos, pero es que además se guarda para el final la sorpresa de la sombra separada de los pies del crío.

Miro la foto de Luis una y otra vez y me cuesta decidir qué es lo que me gusta más. Claro, lo que está sucediendo con ese hombre subiéndose el bañador justo a la vez que un niño corre a su lado vestido con una camiseta que pone laugh (que se puede traducir por “ríe” o “risa”) es impagable, pero es que además la propia sombra del chaval es tremendamente atractiva, y también lo es cómo se reparten los personajes en el encuadre: de abajo hasta la mitad de la escena y de un lado al otro, con el crío justo en medio.
Lo he buscado: “momentazo” no aparece en el diccionario de la Real Academia de la Lengua. Una pena, porque podrían ilustrar el término con esta foto.
Elección final y análisis
Tengo claro que las cinco imágenes finalistas que te he mostrado han logrado llevar el tema propuesto más allá del mejor ejercicio estético, ya que todas ellas consiguen que miremos atentamente, incluso después de haber descubierto la parte que más llama nuestra atención. Por eso, una vez más, elegir una única imagen no ha sido tarea fácil. Pero de eso va esto, así pues…
La elección final de #misiónrubixephoto 014: “Instante Decisivo” recae en la imagen de Daniel Povedano.

Me gusta saber dónde debo mirar una imagen para encontrar aquello en lo que se ha fijado el fotógrafo, sobre todo si después mi vista puede seguir vagando por ella para localizar más cosas interesantes, sabiendo que hay un “ancla visual” en algún sitio.
La imagen de Daniel consigue justamente eso: no cabe duda de que lo importante sucede prácticamente en el centro del encuadre con esa paloma a punto de picotear los granos de la mano del hombre (al que, a pesar de ocupar una buena parte de la imagen sólo puedo intuir), que está rodeada de otros elementos significativos (más manos, y las torres del monumento al fondo).
Fíjate lo despejada que está la fotografía a pesar de todos los elementos que se meten en ella: el plano contrapicado ha limpiado el fondo y facilitado mucho su lectura.
Hay otro detalle sutil que contribuye definitiva a que la imagen sea tan limpia: fíjate en el contorno de la paloma y en cómo nada, a excepción de la mano y el borde superior del edificio, lo toca. De esa forma su silueta es más evidente.
Además, el hecho de que la paloma tenga colores más oscuros que el resto de la escena también hace que destaque imponiéndose a los demás elementos.
Ocupando, ahora sí, todo el centro del encuadre, esas tres manos generan un triángulo en torno a la paloma, organizando el espacio alrededor de ella y creando un marco sutil pero efectivo.
Por cierto, y ya que hablo de manos, no puedo dejar de mencionar las de los niños (son dos manos derechas así que fuera del encuadre hay al menos dos chavales), los dos gestos son diferentes y a la vez parecidos, están a punto de recibir granos para que otras palomas repitan lo que estamos viendo.
Y por último, pero no menos importante, fíjate en cómo todas las líneas (explícitas o no) que recorren el encuadre forman un ángulo con respecto a los bordes de la imagen. Eso las convierte en diagonales y aumenta el dinamismo de la captura. Por si fuese poco el gesto de la paloma batiendo las alas define otra diagonal que corta a todas las demás y acentúa el efecto.
Esto es lo que el propio Daniel nos cuenta sobre su imagen:
“Respecto de la foto contarte que la elegí porque creí que encajaba bien en la misión, la hice con una cámara compacta que es la que llevo siempre encima, la toma fue en prioridad a la apertura, que es como me gusta llevar la cámara configurada cuando salgo a hacer fotos, y los datos técnicos son: ISO 125, f8 y velocidad 1/800.
La hice cuando volvía a por el coche para irme después de haber estado dando una vuelta por el centro de Barcelona, fue en la plaza Catalunya, tristemente de actualidad estos días, la foto está hecha el 11-08-2017 una semana antes de los atentados, con lo cual para mi paso a ser muy especial un poco por el simbolismo de la paloma.
Estuve un rato intentando captar lo que quería, era una familia, dos nietos, el abuelo que son los que salen en la imagen y la madre de los niños que estaba esperando con el carrito.
Hice como unos 4 o 5 intentos. En el cuarto intento se acercó la madre para preguntarme qué hacia (algo que no me extrañó) yo le respondí muy tranquilo que no estaba haciendo nada malo, después se alejó y fue a la quinta cuando logré hacer la foto que quería, después me acerqué a ella y le enseñé la foto para que se quedara tranquila. Sonrió y después de decirme lo típico, “que en los tiempos que corren y las cosas que se oyen que no se fía de nadie”, nos despedimos y eso fue todo.”
Conclusiones
No importa lo manido que sea un concepto como el instante decisivo, no importa que durante décadas lo hayamos perseguido en las calles de todo el mundo con nuestras cámaras en las manos, siempre hay margen para sorprender. Y es que además, tal y como demuestran los cinco finalistas de la #misiónrubixephoto 014, no hace falta que esté sucediendo nada excepcional para que nuestra imagen sea una gran fotografía.
Enhorabuena a todos los que habéis participado, y en especial a Alberte, Ariadna, Daniel, Javier y Luis por sus contribuciones al reto. Pronto arrancaremos una nueva edición de #misiónrubixephoto, con un tema que en este ocasión será decidido por Daniel. Estoy deseando saber con qué nos sorprende…
¿Qué te parecen los finalistas? ¿Coinciden con tus favoritos? ¿Cómo lees tú las imágenes? Ahí tienes los comentarios, me encantará conocer tus impresiones. Si te ha gustado la entrada, no dejes de compartirla en tus redes. Gracias!
Muy buen aporte. Muy Interesante.
Hola Iban. Muchísimas gracias, me alegra mucho que te haya gustado!
Jota
Muy contento de estar entre los finalistas de esta misión,la cual me parecía muy difícil.
Enhorabuena al resto de finalistas y como no al merecido ganador.
Hola Javier. Muchas gracias y enhorabuena también por tu contribución, tu imagen es magnífica. Un saludo.
Jota.