Un blog te aporta muchas cosas. Está la interacción con gente de todo el mundo que comparte el amor por lo que te apasiona (lo que ya compensa con creces el tiempo dedicado) y la exposición a otras formas de ver el mundo, de interpretar lo que (crees que) conoces.

Además, personalmente, mantener esta bitácora me ha dado algunas lecciones que trato de aplicar directamente a mi aprendizaje como fotógrafo.
Ahí van:
La constancia lo es todo (no existen los atajos).
Supongo que esta es una enseñanza que tarde o temprano acabas asimilando en todos los aspectos de la vida. También cuando tienes un blog te das cuenta de que la regularidad en la publicación de entradas es la mejor (por no decir única) manera de asegurar una cierta visibilidad; no sirve de nada publicar cada dos días durante un mes si vas a dejar de hacerlo durante semanas.
Lo mismo sucede cuando te propones crecer como fotógrafo: requiere estudio y práctica constantes. Quizás no puedas dedicarle todo el tiempo que te gustaría, pero cuando está disponible y en el momento adecuado… tiene que ser para la fotografía.
Mejor calidad que cantidad.
Cuando escribes para que alguien te lea, sobre todo si lo haces en tus ratos libres, has de escoger entre llenar líneas y líneas de texto sin demasiado contenido o intentar aportar algo personal en cada entrada.
Es exactamente la misma elección que debes plantearte con las fotografías que enseñas. ¿Quieres mostrar cualquier imagen aunque no te emocione o prefieres limitarte a aquellas que te dicen algo, esas pocas que destacan entre las demás?
En ese sentido un blog es una verdadera escuela; tienes la oportunidad de recoger la opinión de “tu público” a través de los comentarios y de saber cuánta gente ha visitado tus posts. Al final aquellos con menos visitas y/o con menos respuestas podrían ser los más flojos o, como mínimo, deberían darte un motivo para pensar.
Es un aprendizaje continuo y tremendamente constructivo que me he llevado a la fotografía; cada vez tengo menos reparos en borrar las fotografías que no me emocionan para mantener aquellas que sí lo hacen.
Tienes que ser el más crítico con tu trabajo.
Esta tiene mucho que ver con la anterior: al escribir una bitácora te fuerzas a leer y releer lo escrito, a confirmar varias veces los datos que pones (me pasa siempre que escribo sobre algún fotógrafo al que admiro) y siempre, siempre hay un momento de duda antes de pulsar el botón de “publicar” porque a partir de ese momento tus palabras van a estar expuestas a la vista de los demás, no hay vuelta atrás.
De la misma manera, antes de dar una imagen por acabada me obligo a examinarla de una forma exigente. ¿Está a la altura de lo que pretendía obtener cuando pulsé el disparador? ¿De verdad me parece lo suficientemente buena para que los demás la vean?
Saber que esa fotografía va a ser vista por más o menos gente supone un pequeño extra de presión que deberíamos aprovechar para mejorar poco a poco.
Empiezas haciéndolo por ti y sigues (en parte) por los demás.
Te lo conté en el primer aniversario de este blog: cuando empecé con él no tenía expectativas más allá de compartir mi pasión por la fotografía. Sin embargo tengo que admitir que, con el paso del tiempo, saber que hay gente que se pasa por aquí todos los días me ha hecho sentir una sensación de cierto vértigo. Un vértigo agradable, eso sí.
Supongo que cuando exploras una forma de expresión artística como la fotografía, puedes escoger entre desarrollar una visión radicalmente distinta a lo existente o acercarte a esa forma de mirar de la gente que admiras, tratando de despertar las mismas respuestas que sus imágenes han causado en ti. He decidido seguir ese camino: por eso cuando publico una fotografía lo hago con la intención de que haga disfrutar a quien la ve, como otros han conseguido conmigo.
Ya ves, tener un blog puede ser una escuela de muchas cosas, también de fotografía!
Personal projects are very exciting, Jota.
I´ve discovered that I need them so much, Bente. Having goals is absolutely essential for me.
Thank you!
Jota.
…
La clave es estar cómodo en tu hogar virtual, disfrutar con aquello que compartes con los demás. No hay más misterio para esa satisfacción personal que todos buscamos.
Sobran los ánimos y el talento, así que poco puedo decir salvo “sigue así” ;)
Los demás estaremos siempre por aquí gozando de Rubixe.
…
Bicos-bicos y feliz verano.
La comodidad tiene mucho que ver también con estar a gusto con las visitas que recibo, como la tuya. :)
Me encanta tenerte (teneros) por este rincón que trato de mantener lo más acogedor posible para la fotografía y para vosotros.
Bicos, Pau.
Jota.