
En alguna ocasión te dije que a veces basta con localizar un buen fondo y esperar a que frente a él suceda algo. A veces funciona, pero siempre hay que tener en cuenta que el fondo, quieras o no, es un protagonista más de tus fotografías, cuando en él hay mucho elementos que compiten por la atención de tu espectador debes tratar de ordenar un poco el encuadre, sobre todo si tu protagonista se encuentra en primer plano y no quieres que se confunda con el fondo.
Una forma de conseguirlo es jugar con el desenfoque, ya sabes: grandes aperturas de diafragma, longitudes focales largas y fotografiar desde cerca ayudan a conseguir una pequeña profundidad de campo, lo que inmediatamente separa al sujeto del fondo. El problema llega cuando no puedes o no te da tiempo de acercarte lo suficiente, o cuando fotografías con una focal corta (en mi caso el 99% de las veces se trata de un 35mm fijo).
Afortunadamente en ocasiones la situación te permite organizar mínimamente los elementos y componer una imagen que no resulte confusa, a pesar de todos los ingredientes incluidos en el encuadre.
La imagen
Composición
Me gusta fotografiar en la playa. Es un entorno que da pie a muchas situaciones distintas y en el que la actitud despreocupada de los bañistas se presta a obtener imágenes divertidas, a veces incluso un tanto surrealistas. Soy consciente de que la visión cómica y sarcástica de Martin Parr en su libro Life´s a Beach me ha influido en cómo escudriño ese lugar últimamente…
Estamos en Siracusa, una localidad de la costa este de Sicilia con una bellísima zona antigua conocida como Ortigia, completamente rodeada por el mar y unida a la isla únicamente por varios puentes. Hace un calor asfixiante, así que tras caminar por sus estrechas calles decidimos descansar un rato en una pequeña playa a la que se accede mediante unas empinadas escaleras que parten desde el paseo.
Tan pronto como pongo los pies en la arena esas dos sombrillas de colores brillantes y primarios reclaman mi atención. De repente un hombre que estaba tumbado al sol se pone de pie delante de ellas, adopta esa postura con los brazos en jarra y la escena se vuelve un poco más interesante.
Tengo dos sombrillas, un bañista y el mar con el horizonte al fondo, todo junto y mezclado. Para organizar mínimamente el encuadre me muevo ligeramente hacia un lado hasta que el hombre queda justo en medio, me pongo de puntillas para que su cabeza quede por encima de las sombrillas y los hombros por debajo, lo que además consigue que el horizonte no pase justo tras su cara (ya sabes que conviene vigilarlo). Por suerte se mantiene en esa postura algunos segundos más…
Clic.
Para mi sorpresa cuando un rato después, ya en la toalla, reviso las imágenes de la mañana, compruebo que el bañador tiene una banda roja, el tercer color primario que con el amarillo y el azul se llevan el interés a ese triángulo invertido que forman en el centro del encuadre.
Ajustes de cámara
La sensibilidad del sensor está en ISO 400 ya que es un día soleado y es mediodía, de forma que ni siquiera las sombras en las calles son demasiado profundas. He ajustado la cámara en modo prioridad a la apertura con un diafragma f/8, con tanta luz la velocidad de obturación fijada por la cámara es muy rápida, lo que se acentúa al haber compensado la exposición en 1/3 de paso en algún momento anterior.
Esa subexposición causa que el negativo digital sea más oscuro de lo que me hubiese gustado (en la playa, un entorno tan despejado y brillante hubiese sido conveniente sobreexponer ligeramente en lugar de compensar en negativo), por suerte no tanto como para no poder corregirlo al revelar la imagen con Adobe Lightroom.
La calle es un entorno por lo general bastante caótico, en ocasiones hace falta trabajar un poco la escena… ¿Qué opinas? ¿Cuáles son tus trucos para ordenar el encuadre? ¿Te ha gustado la entrada? Compártela en tus redes (gracias)!
No lo olvides: hay muchas más imágenes desmenuzadas en detalle en el blog…
encontré este blog buscando en Internet y el contenido que tienes es muy bueno, los consejos san muy claro.
Hola Ystélio! :)
Me alegra que me hayas encontrado, y aún más que te gusten los contenidos del blog. Gracias por pasarte por aquí y dejar tus impresiones, será un placer seguir contando con tu visita.
Saludos.
Jota.
El fondo como indicas es un elemento muy importante de las fotografías. Unos fotógrafos le dan más protagonismo y otros menos, pero por ejemplo fotógrafos como José Benito Ruíz componen mucho con los elementos del fondo.
Comentando tu foto creo que la combinación de colores funciona muy bien, incluso con ese regalo visual extra del bañador que te deparó la escena… jejeje, que además si hubiese sido de otra forma hubiese sido difícil eliminarlo recortando, por la situación de las manos. Enhorabuena por la toma, en la que yo también veo la influencia de Martin Parr, qué mejor camino que seguir a los maestros, ¿verdad?
Hola Braulio.
Yo también creo que hacerse consciente de la importancia del fondo es un momento clave en el crecimiento como fotógrafo, hay un antes y un después.
Me alegra que te guste la imagen. Parr siempre está en “mis oraciones”, aunque nunca sé si su influencia es consciente o inconsciente, de la misma forma que me pasa con otros tantos. ;)
Gracias por pasarte y comentar, saludos!
Jota.