En la primera entrega dedicada al histograma vimos que en realidad no es otra cosa que un conjunto de líneas, unas al lado de otras, cuya posición depende de la luminosidad y con una altura que indica la cantidad de pixeles con ese valor. Cuando todas esas líneas están próximas forman un perfil similar al de una montaña, con picos en los valores de luminosidad más abundantes en la imagen.
Al observar un histograma podemos evaluar la exposición de la fotografía a la que hace referencia: si la mayoría de éste se encuentra a la derecha significa que en la imagen abundan las zonas luminosas, si gran parte del histograma se ha desplazado hacia la izquierda la interpretación es la contraria, se tiende a la oscuridad (tienes ejemplos en la entrada a la que hacía referencia antes). Entre ambos casos caben infinitas posibilidades.
El histograma y la pérdida de información
Si en algo nos puede ayudar el histograma es a la hora de detectar problemas de exposición en nuestras imágenes. Para entenderlo, partamos de una situación sin problemas.
En la siguiente imagen puedes comprobar que el histograma es tan amplio que abarca la totalidad del eje horizontal sin cortarse en ninguno de los dos extremos, eso significa que en la fotografía a la que corresponde hay zonas claras y oscuras, y que en ellas es posible apreciar detalle porque no son tan brillantes ni tan sombrías (respectivamente) como para que no haya información, por eso puedes distinguir lo que hay en las sombras y la textura en las partes más luminosas.
Si por el contrario el histograma acaba abruptamente en uno de los laterales nos está avisando de que hemos perdido detalle, en las sombras si se corta a la izquierda y en las zonas luminosas si lo hace en el extremo derecho.
De esa manera, al revisar en la pantalla trasera de nuestra cámara el histograma de una fotografía, podemos evaluar si está correctamente expuesta, o si se ha producido un “recorte” en las sombras (imagen con subexposición, como el ejemplo en blanco y negro) o en las luces (como la imagen sobreexpuesta de la iglesia en color). Eso nos permite tomar las decisiones necesarias para corregirlo, si es lo que queremos.
Desplazando el histograma para corregir problemas de exposición
Ya sabemos diagnosticar problemas de exposición mediante el histograma, ahora vamos a aprender a corregirlos de manera práctica.
Decíamos que cuando el histograma aparece cortado a izquierda o derecha significa que en la fotografía se ha perdido información en las sombras o en las luces respectivamente. De ahí podemos concluir que para recuperar detalle en una imagen con el histograma recortado en su parte izquierda (pérdida en las sombras) hay que desplazarlo hacia la derecha, y al revés: para recuperar información en una imagen cuyo histograma se corta a la derecha debemos moverlo hacia la izquierda.
Podemos hacer esto (hasta cierto punto) a posteriori frente a la pantalla y mediante un software de revelado digital como Lightroom, por ejemplo, pero como te había comentado en su día siempre es mejor solucionar la mayor parte de los problemas en el momento de la toma (un buen negativo digital siempre es un punto de partida mucho más útil), así que veamos qué hacer si acabamos de tomar una fotografía y comprobamos que el histograma está recortado en uno de los dos lados.
Supón que haces una fotografía (con 1/125 f/8 ISO 200) y cuando la revisas en la pantalla posterior de tu cámara aprecias que el histograma se corta abruptamente a la derecha (has perdido información en las luces). Ahora ya sabes qué quiere decir eso: la imagen está sobreexpuesta hasta el punto de que en ella hay zonas tan luminosas que no tienen detalle. Según lo que hemos visto hasta ahora para corregirlo necesitas desplazar el histograma hacia la izquierda, hasta que el recorte desaparezca. ¿Cómo?
Tienes al menos dos formas de hacerlo:
- repetir la fotografía modificando uno de los tres vértices del triángulo de exposición de manera que la fotografía resultante sea menos luminosa, para eso que tienes que pasar a modo manual, si no lo estás ya, y cambiar al menos uno de los tres valores, por ejemplo un paso completo (aunque puede ser necesario más o menos dependiendo de la posición del histograma): la velocidad de 1/125 a 1/250, la apertura de f/8 a f/11 o el ISO de 200 a 100
- si estás utilizando un modo de prioridad (a la apertura o a la velocidad), puedes compensar la exposición en -1EV, si estás en prioridad a la apertura la cámara reducirá la exposición en un paso cambiando la velocidad de 1/125 a 1/250 (respetando el diafragma f/8 que habías escogido) o cerrará el diafragma en 1 paso de f/8 a f/11 si habías seleccionado el modo prioridad a la velocidad, manteniendo 1/125 como el tiempo de exposición escogido por ti
Cuando repitas la toma tras hacer uno de estos dos ajustes, el resultado será una fotografía menos luminosa, con el histograma desplazado hacia la izquierda en un paso (como la línea punteada en el dibujo), quizás suficiente para que el recorte en las luces haya desaparecido. Dicho de otra forma, ahora las partes más brillantes de la escena mostrarán detalle y podremos apreciar qué hay en ellas.
Si te limitas a cambiar el diafragma o la velocidad (sin compensar la exposición) en un modo de prioridad el histograma no se desplaza porque la cámara compensa tu decisión ajustando en el sentido contrario el tiempo o la apertura respectivamente (si pasas de f/8 a f/11 la cámara pasará a su vez de 1/125 a 1/60 y al revés), con lo que el nivel de exposición resultante va a ser el mismo y el histograma mantendrá su posición.
Cuando compensas la exposición en uno de los modos de prioridad, la cámara corrige su decisión en el ajuste que depende de ella (la velocidad en el modo de prioridad a la apertura, diafragma en el modo de prioridad al tiempo) tanto como tú quieras: +/- 1/3EV, +/- 2/3EV, +/- 1EV,… En cambio, si corriges el histograma manualmente, en lugar de cambiar sólo uno de los tres ajustes puedes actuar sobre varios, siempre y cuando eso lo mueva en la dirección que te interesa. Por ejemplo en vez de reducir la exposición dividiendo el tiempo a la mitad (de 1/125 a 1/250), podrías reducir menos el tiempo (de 1/125 a 1/160), y además cerrar ligeramente el diafragma (de f/8 a f/9) y bajar la sensibilidad (de ISO 200 a ISO 160). Todos esos pequeños cambios se suman en la misma dirección: reducen la exposición, y por tanto, mueven el histograma hacia la izquierda, con lo que contribuyen a corregir un histograma que re recorta a la derecha.
Obviamente, si la imagen está subexpuesta y no tienes detalle en las sombras tienes que hacer justo lo contrario: cambiar al menos uno de los tres ajustes de forma que la exposición sea mayor (aumentando la apertura de f/8 a f/5.6, o el tiempo de de 1/125 a 1/60, o la sensibilidad de ISO 200 a 400) o compensar la exposición en un modo de prioridad en +1EV. De esa forma el histograma se desplazará hacia la derecha (tal y como indica la línea punteada), solucionando el recorte a la izquierda (sombras).
Mover el histograma hacia la derecha ¿por qué? ¿siempre?
Quizás hayas oído que debes “derechear” el histograma… Lo que se pretende decir con ese término (inexistente, en realidad) es que nos conviene que nuestro histograma bascule hacia la derecha; el motivo es que el sensor de nuestra cámara es capaz de recopilar mucha más información en esa zona, se podría asimilar a que en las partes luminosas la cámara cuenta con más “materia prima” para construir la imagen, de ahí que en las zonas en sombra el ruido digital sea más evidente.
Si decides seguir este consejo ya puedes hacerlo: sabes cómo desplazar el histograma hacia la derecha, sólo tienes que aumentar la exposición tal y como te contaba en el punto anterior. La pregunta que tienes que hacerte es ¿realmente el aspecto que quiero conseguir es el de una imagen luminosa? Si la respuesta es sí y tu cámara no alcanza ese resultado por sí misma, aplica la técnica que acabamos de ver. Pero no lo hagas sin reflexionar, sólo porque lo has leído: probablemente si estás fotografiando una zona con sombra, por ejemplo, no querrás que el histograma aparezca a la derecha, al fin y al cabo se trata de una escena oscura que no se vería así si el histograma se desplaza hacia los valores más luminosos.
Una vez más te interesa conocer el funcionamiento de tu cámara y las técnicas a tu disposición, pero lo importante al final es tomar las decisiones en base a tu propio criterio, si delegas esa parte tus imágenes no llegarán a ser realmente tuyas…
Hasta aquí, el histograma, una de las herramientas que más pueden hacer por la calidad de tus imágenes, siempre y cuando le saques partido. Ojalá estas dos entradas te hayan ayudado con él. :-)
Si te surgen dudas o quieres dejar alguna sugerencia, ahí tienes los comentarios, a tu disposición. Recuerda compartir la entrada con tus amigos si te ha gustado y no olvides que aquí están recopiladas todas las entradas dedicadas a aprender técnica fotográfica.
Es muy de agradecer tu dedicacion y la facilidad didactica en tus textos y exposiciones.
Saludos.
Gracias a ti por tus amables palabras, Pepe. Intento que los textos sean fáciles de comprender, me alegra que consideres que es así. :)
Saludos, y gracias otra vez por pasar y contar.
Jota.
Explicaciones muy didacticas,sencillas y abarcando temas muy distintos, en fin, una gozada seguirte!
Sigue así!!
Hola Javi! Muchas gracias por tus amables palabras, me alegra que te gusten los contenidos del blog. Un placer tenerte por aquí. :)
Saludos.
Jota.
Yo para la “street photography” que tengo sombras y luces casi siempre llevo un punto a la derecha. Normalmente son fotos que no se pueden repetir, así que prefiero pasarme un poco de luz a quedarme sin la foto por que no tengo detalle en las sombras.
Un saludo!
Hola. :)
A mi me pasa lo contrario, prefiero que las sombras tiendan a la oscuridad para ganar en dramatismo, así que por lo general subexpongo -1/3EV. Supongo que también depende de cómo puedas recuperar las luces frente a la pantalla, claro. :)
Gracias por el aporte, muy interesante comparar preferencias. ;) Saludos!
Jota.
Cada dia aprendo algo con tus entradas ! Gracias
Hola Charo!
No sabes cuánto me gusta leer eso… Gracias!
Saludos. Jota.