La semana pasada, como te adelantaba en la última entrada del blog, me acerqué a Madrid para aprovechar la coincidencia de varias exposiciones irresistibles, con la intención de empaparme de Fotografía y de paso compartir unos días con esos amigos que no veo tanto como me gustaría. Al final, en lugar de exprimir las jornadas al máximo y tratar de abarcar demasiado opté por dedicar su tiempo a cada evento, asío que disfruté reposadamente de las de Bernard Plossu, Garry Winogrand y Enrique Meneses.
Hoy te cuento acerca de las dos primeras.
Exposición de Bernard Plossu en La Fábrica
En la sala-tienda de la editorial La Fábrica, a medio camino entre el Museo Reina Sofía y el Prado, se exponen 25 imágenes inéditas de Bernard Plossu bajo el título “El oeste americano. Años 70” (en realidad las tomas abarcan desde mediados de los años 60 a mediados de los 80), la mayoría son en blanco y negro, lo habitual en la obra de este fotógrafo nacido en Vietnam que recorre el mundo con su cámara desde hace décadas, pero además tenemos la oportunidad de disfrutar algo insólito, cinco fotografías en color positivadas mediante técnica de carbón Fresson, lo que les confiere tonos sumamente delicados y una atmósfera poética muy especial, similar a la de sus imágenes monocromas pero con un irresistible atractivo añadido.
Las tomas no tienen más vínculo que una localización geográfica próxima, de forma que pasas de una calle polvorienta en algún pueblo perdido del oeste a una carretera en tinieblas y rodeada de árboles, del cartel de algún negocio a unas botas vaqueras, de un postre a unas piernas flexionales. Y sin embargo acabas sintiendo una extraña familiaridad con los escenarios y la gente que aparece (o no) en ellos…
Por si las imágenes inéditas de Plossu no fuesen motivo suficiente para visitar las instalaciones de La Fábrica (que lo son), tienes que saber que las paredes de la tienda están repletas de libros de Fotografía, no sólo de esa editorial sino también de Aperture, Steidl, Taschen o Phaidon, por mencionar sólo las más conocidas, lo que hace que después de contemplar con calma la pequeña sala de exposiciones con todas las imágenes de pequeño formato colgadas a la misma altura, sea obligado hacer lo mismo con los estantes y las mesas repletos de tentadoras obras de todos los géneros y precios.
Dónde: en La Fábrica, Calle Alamenda, 9. Madrid.
Cuándo: hasta el 31 de mayo de 2015.
Exposición de Garry Winogrand en Fundación MAPFRE (concluida)
Las instalaciones de la Fundación MAPFRE en Bárbara de Braganza (a sólo unos minutos de La Fábrica, caminando hacia el norte) acogen de tanto en tanto retrospectivas sobre grandes autores de la historia, allí pude disfrutar de la obra de Stephen Shore durante mi última visita a Madrid, el pasado mes de noviembre. En esta ocasión le tocaba el turno a uno de los fotógrafos de calle más importantes de la historia: Garry Winogrand.
La muestra recogía más de 200 fotografías organizadas no de forma cronológica sino temática: “Bajando desde el Bronx” (el mayor de los tres bloques), con imágenes capturadas entre los años 1950 y 1971 en su New York natal, pura fotografía callejera en las aceras de la ciudad, “Un estudiante de Norteamérica” que compila fotografías tomadas durante la misma época pero lejos de la gran ciudad que hablan de una forma de vida tan distinta que bien podría tratarse de un país diferente, y por último “Auge y crisis” que se compone de las últimas imágenes de Winogrand, tomadas de 1971 hasta su repentina muerte, un período en el que se limitó a fotografiar sin editar su trabajo, de ahí que la selección de esta parte fuese póstuma. Precisamente el hecho de que muchas de las imágenes expuestas no hayan sido escogidas por el propio fotógrafo hace que la exposición deje un sabor agridulce, al fin y al cabo, la decisión sobre qué capturas mostrar forma parte del proceso de fotografiar y no estoy seguro de hasta qué punto podemos comprender el mensaje de otros cuando no han sido ellos los que han “cerrado el círculo”.
En cualquier caso la muestra de Winogrand, que por cierto recorrí dos veces (la primera con una visita guiada muy útil para situar el contexto histórico y artístico de sus imágenes), fue una gran oportunidad para contemplar algunas de las fotografías más famosas de uno de los pioneros de la Fotografía callejera. Y ya sólo eso merece la pena.
Dónde: en Fundación MAPFRE, Bárbara de Braganza. Madrid.
Cuándo: hasta el 3 de mayo de 2015.
¿Qué exposiciones recuerdas de una manera especial? ¿Cuáles te han marcado para siempre y cuáles te han dejado más bien frío? ;-) No dejes de compartir tus reflexiones en los comentarios, será un placer leerte. Y recuerda compartir la entrada en tus redes si te ha gustado. Gracias!
Hola!
Yo también estuve en la de Winogrand, también con guía, y me gustó bastante. No dejó de llamarme la atención las críticas negativas que recibió por hacer fotos en las que no se explicaba todo (¿Es que acaso necesitamos que nos lo den todo mascado, como los finales de muchas películas?), por encuadrar ‘torcido’, por dejar sin revelar más de 6600 negativos… No está aquí para explicarse pero ¿no podemos pensar que hacía fotos para experimentar, para divertirse, o simplemente porque sabemos que estamos de paso y es una manera de decir “yo estuve allí”? Y porque veía así las cosas. también.
A la pregunta de las expos que más me han impactado, cito los siguientes (algunas vistas también en Mapfre): Imogen Cunningham, Emmet Gowin, Catalá-Roca, Antoni Arissa y Sebastiao Salgado. Ahora espero con ganas la de Chema Madoz, en Alcalá 31 ¡qué fácil para los que vivimos en Madrid!
De todas se aprende siempre algo, pero quizás de las que me ha parecido más rarita ha sido la de Roni Horn.
¡Un abrazo!
Hola Marta. :)
Espero que no coincidiésemos, habría sido una pena no vernos si estábamos allí los dos, yo fui el martes, a la visita guiada de las 13:00… Me gustó la expo de Winogrand pero, tal y como escribo ahí arriba, me decepcionó un tanto que en torno a la mitad de las fotos no hayan sido escogidas por él. Quizás eso me sugestionase, pero me gustó más la primera parte de las tres, la que él editó en su mayoría. Por cierto, completamente de acuerdo contigo: es demasiado fácil censurar al que abre una nueva vía en el arte, y precisamente hay que dar mérito a la exploración y la experimentación, así nacen las cosas buenas…
Vaya, has visto unas cuantas y muy buenas allí, qué envidia tenerla tan cerca! Ya contarás cómo está la de Madoz, tengo ganas de verlo en alguna pared.
Saludos, y gracias, como siempre, por pasarte y comentar. Bico! :D
Jota.
Yo estuve en la de las 11:00, que terminó a las 12:00, más un rato más en revisar la expo… No, no coincidimos por poco!!
Ya te contaré la de Madoz. La inauguran el martes que viene, por si alguien se anima, y estará tres meses.
Otro saludo y gracias a ti por este espacio.
Tiene muy buena pinta esa de Chema. Me encantará saber qué te ha parecido. Saludos Marta!
Jota.