Hoy estrenamos categoría en el blog: en APRENDE FOTOGRAFÍA iré publicando entradas para que conozcas esos pequeños secretos que harán que tus imágenes sean cada vez más conscientes, más personales, más tuyas.
Y como puesta de largo vamos a hacer algo imprescindible para perderle el miedo a esto de la fotografía: desmitificar nuestras cámaras. No cabe duda de que hoy en día llevamos en nuestras manos una cantidad de tecnología tal que hace sólo unos años era impensable. Las cámaras actuales pueden hacer cosas que antes ni siquiera estaban a la altura de los ordenadores más potentes (geoposicionar nuestras fotos, subirlas automáticamente a nuestro perfil de las redes sociales, disparar a velocidades altísimas, ofrecer una abanico de valores ISO descomunal, etc.) y nos ofrecen un buen montón de ayudas para hacernos la vida más fácil (?) a la hora de capturar imágenes. O al menos esa es la teoría…
Porque precisamente como consecuencia de tantas opciones y valores es fácil perder de vista la esencia. No te dejes engañar: aunque tu cámara tenga infinidad de botones, ruedas, anillos y un menú con tantas páginas que parece la web de un ministerio… en el fondo no es para tanto. Ahí va algo que te conviene tener siempre presente cuando sostengas tu sofisticadísima cámara frente a tu cara y te dispongas a componer tu próxima imagen, no importa si se trata de una réflex semi-profesional (o directamente “pro”), una compacta, una bridge o una cámara sin espejo:
Tu cámara es, en esencia, una caja negra que permite la entrada de cierta cantidad de luz hacia una superficie sensible que registra la imagen.
Piensa en tu máquina como una caja completamente sellada a la luz que aloja esa superficie sensible, puede ser una película enrollada dentro de un chasis, lo que viene siendo un “carrete” para fotografía analógica, o un sensor electrónico que transforma la luz en un archivo informático cuando se trata de fotografía digital. El quid de la cuestión es que cuando pulsas el botón, un orificio se abre y permite el paso de luz hacia su interior.
Qué cantidad de luz entra y cómo la “forma” de ese paquete afecta a la apariencia de tus fotografías ya es harina de otro costal. Lo veremos pronto. ;-)
¿Qué te parece la entrada? ¿Quieres contarme tu experiencia o plantear alguna duda? Ahí tienes los comentarios, son todos tuyos. :-) Si te h gustado y/o parecido interesante, no dejes de compartir este contenido en tus redes. Gracias!
Siguiente entrada del curso: Cómo funcionan las cámaras de fotos
Muchos no aprendemos a hacer mejores fotos por la pereza que da a veces tanto botoncito. Yo tengo como asignatura pendiente la velocidad y el tiempo. Una camara bastante buena, pero sin poder aprovecharla al 100%.
Buena categoria. A unos cuantos nos hacen falta posts asi. Enhorabuena. ;)
Me alegra mucho que te guste!
Lo del tiempo y la apertura llegará a esta categoría del blog… Sólo es cuestión de tiempo. ;)
Gracias!
Jota.
Recuerdo mi primera cámara de fotos, una kodak instamatic de esas de cartucho
con 24 exposiciones, carísimos esos cartuchos bufff. Y ahora? (me acuerdo de un gif que me viene a la memoria) tanto botón y palabritas ugggg.
Siempre es recomendable antes que empezar a hacer fotos como un/una loco/loca poseído/poseída por ese deseo irrefrenable de empezar a hacer
fotos con nuestra nueva compañera. Lo recalco en grande y lo repito
LEEROS EL MANUAL LEEROS EL MANUAL por favor.
Tenemos una máquina de precisión que requiere ajustes y es indispensable
conocer cómo cambiarlos para obtener esa foto que queremos, porque no olvidemos que los ajustes que hacemos no nos valen para todas las fotos.
Hola José Emiliano. :)
Muchísimas gracias por tu aportación, estoy de acuerdo contigo: aunque la cámara tiene un funcionamiento relativamente simple, conviene conocer sus particularidades para sacarle partido.
Saludos!
Jota.
Buenos días jota:
Efectivamente, así es, lo estaba enfocando a la cantidad de menús y submenús qie tiene.
Por cierto, quería hacerte una pregunta pero por alguna extraña razón de la barra de iconos que salen a mi izquierda,
el del botón del sobre no me funciona.
Si no tienes inconveniente, hazme llegar tu correo a través del mío.
Un saludo.
Hecho! Un saludo y gracias otra vez!
Jota.