Análisis de una Fotografía callejera: Fred Herzog, 1968

Un hombre con una venda en la mano para un taxi.
Fotografía © Fred Herzog

¿Prefieres la Fotografía callejera en blanco y negro o en color? Esa es la encuesta que planteé en mi perfil de Instagram hace algunos días. El resultado, tras más de 500 respuestas, resultó bastante sorprendente: el cincuenta y tres por ciento de la gente siente predilección por la street photography en color.

Y yo que pensaba que el blanco y negro seguía teniendo más tirón… Por cierto, ¿sabes por qué en un determinado momento decidí fotografiar en color?

Si hablamos de grandes fotógrafos de calle en color no podemos olvidarnos de Fred Herzog, uno de los pioneros junto a Saul Leiter (el genio con alma de pintor) y Helen Levitt (la otra gran dama de la Fotografía callejera).

Nacido en Stuttgart pero nacionalizado canadiense, Herzog recorrió Vancouver haciendo todo lo contrario que Henri Cartier-Bresson: renunciando al instante decisivo y registrando el paisaje urbano con película en color.

Esto es lo que dicen de su obra en el libro que te enlazo al final de esta entrada:

El color como un medio de expresión autónomo, pero sin sensacionalismo. El color como información adicional con un efecto estético colateral, esto fue lo que interesó a Fred Herzog y resultó en una obra que goza de una coherencia poco usual, artísticamente persuasiva, innovadora y perspicaz, que a través de aproximadamente 100,000 fotografías dejan a uno con la boca abierta – simplemente en términos de cantidad y calidad.

Hans-Michael Koetzle en Modern Color.

La imagen

Composición

La de Herzog es una de esas fotografías con las que podemos contarnos cien historias diferentes. Probablemente el mayor argumento para que esta lo consiga es el contraste entre los dos personajes que aparecen: un hombre y una mujer que difícilmente podrían ser más distintos (y cuyas vidas seguramente sean igual de diferentes).

¿Qué le ha pasado a él? ¿A dónde va? ¿Y ella? ¿Lo mira como si lo juzgase o es solo una casualidad? Las preguntas no dejan de sumarse y con ellas aumenta el interés de la captura.

En lo formal, dos figuras dominan el encuadre dividiendo el espacio en tres partes. Si el hombre llena por completo la vertical la mujer lo hace ayudada por la farola que tiene detrás.

Análisis de una fotografía callejera de Fred Herzog.

Los dos están a diferentes distancias de la cámara, con lo que se consigue sensación de profundidad (aunque él sea más alto que ella no lo es tanto como aparenta, y nuestro cerebro “reconstruye” el espacio que hay entre ellos).

Estudio de una fotografía callejera de Fred Herzog.

Todas esas líneas convergiendo en la parte derecha del encuadre contribuyen a la sensación de profundidad y dotan a la imagen de dinamismo y cierta tensión.

Por cierto, que algunas son explícitas (como las líneas de la carretera y los tejados) y otras implícitas (no obvias) como la dirección en la que caminan los hombres de la derecha o las miradas de los dos protagonistas.

Análisis de una fotografía callejera de Fred Herzog.

Aunque se trata de una fotografía callejera a todo color (uno de los sellos de Fred Herzog) hay una cierta coherencia cromática dado que el rojo y el verde se repiten en todo el encuadre y aportan consistencia.

Análisis de una fotografía callejera de Fred Herzog.

Pero mi parte favorita de esta imagen está en los detalles. Cuando te decía que el hombre y la mujer no podrían ser más distintos me refería justo a esto.

Fíjate en las pequeñas cosas que hablan a las claras de lo diferentes que parecen. Él seguramente parando un taxi, con un moratón, un corte en la barbilla (¿habrá sido al afeitarse?) y una mano vendada (quizás como consecuencia de la misma pelea que la marca en el brazo). Ella esperando su turno, con el bastón colgado del codo y los guantes en las manos.

Estudio de una fotografía callejera de Fred Herzog.

Ajustes de cámara y técnica

Y ahora juguemos a adivinar los ajustes de la cámara de Herzog en base a lo que podemos deducir de la imagen:

Libros de Fred Herzog

  • Modern Color (monográfico con más de 230 imágenes inéditas).

Enlaces interesantes

Hasta aquí mi análisis de la foto de Herzog. Me pregunto qué ves tú en ella y si te gusta tanto como a mí. Dímelo a través de los comentarios.

Gracias por leerme y por compartir esta entrada entre tus amigos.

Hasta pronto.

Jota.

16 comentarios en «Análisis de una Fotografía callejera: Fred Herzog, 1968»

  1. Esa calle está llena de locales miticos en cualquier imagen clásica americana: el café, un hotel, o varios, un gimnasio, unos arcades…es redonda.
    Si me permites un pequeño apunte, más que pedir un taxi, yo creo que se acerca el autobús y es lo q esperan los dos. Al señor lo veo más de autobús que de taxi. Parece que viene de recogida de una noche muy movida.
    Me encanta esta foto

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  2. Mi observación apunta a cuánto hay de “buscado” por Herzog, en este caso, y cuánto de suerte. Esperó el momento justo en que los hombres que aparecen en el fondo estuvieran en el lugar justo de la línea de fuga, o se dio cuenta de la existencia de los mismos una vez con la foto en sus manos? Analizó previamente cada paso de la toma o simplemente disparó con los parámetros que ya traía dispuestos en su cámara? Cuánto aporta la suerte a nuestras fotos? Lógicamente el tipo sabía de qué iba la cosa. No tengo dudas al respecto. El resultado es una foto bellísima, y nos hace pensar en la historia detrás de la misma. Mi pregunta apunta a, de alguna manera, pensar en la posibilidad de alguna vez encontrar esta belleza en mis propias fotos. Gracias

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    • Hola Ricardo!

      Siempre trato de analizar las imágenes sin dar por hecho cómo procesó la información el fotógrafo en el momento de hacer la foto, sobre todo porque estoy seguro de que gente como Herzog era capaz de ver más y más rápido que yo en la calle. Además intento tener presente que hay al menos dos decisiones: cuándo y qué fotografiar y qué foto vale la pena conservar. Quiero decir que a lo mejor no se fijó en los hombres que mencionas (o quizás sí, quién sabe) pero puede que sean uno de los motivos por los que esta foto ha llegado hasta aquí. :)

      Gracias por tu aportación y ánimo con tu búsqueda, es la misma que la mía. :)

      Jota.

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      • Hola, en mi opinion es suerte a medias. Despues de muchos años y muchas fotos adquieres la habilidad de tener todo o casi todo estudiado en el encuadre y el factor suerte es que al sacar la foto, el hombre del fondo se posicione en el lugar concreto que el fotografo deseaba y tuvo la suerte de concretarse cuando se dio el movimiento del brazo. No creo que le vino de forma sorpresiva. Por ultimo añadiria perspectiva atmosferica y patrones y que es una parada de Bus como el cartel en rojo indica. Muchas gracias por todo Jota.

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        • Hola Néstor! La suerte, como dices, se prepara a base de trabajo, y Herzog se lo curraba mucho y lo hizo durante mucho tiempo, eso aumenta las posibilidades de lograr algo como esta imagen, sin duda!
          Gracias por tu comentario, tienes razón en lo de la perspectiva atmosférica, que contribuye a la “profundiad” de la imagen.
          Un saludo!

          Jota.

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    • Me temo que el factor suerte tiene un peso no menor en la fotografía de calle, nos guste aceptarlo o no, básicamente porque cuando hay decenas de variables en tiempo real es imposible que uno pueda cuadrarlas al mismo tiempo.

      Seguramente podrías esperar a que los señores en la lejanía encajaran perfectamente en la composición, pero lo lógico es que lo que esperara captar correctamente es el gesto de las personas en primer plano, que no tiene porque suceder en el mismo momento. En cuanto a los parámetros estoy seguro que iba con hiperfocal, aunque teniendo en cuenta la poca sensibilidad de la película empleada seguramente fotos como estas sólo podían hacerse en condiciones de luz excelentes, con lo que se añade aún otra variable que hace más complejo lo que comentábamos antes.

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      • Ay, el factor suerte, sí, nos guste o no está ahí. Pero eh, en tu otro comentario dabas la clave para tener más suerte: picar y picar piedra, y tipos como Herzog lo hacían. Así también adquirían la habilidad de exprimir herramientas mucho menos eficientes que las actuales con mejor resultado del que nosotros sacamos a cámaras con sensibilidades insultantes. :)

        Un abrazo. Siempre es un placer leerte.

        Jota.

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  3. Fotografías como esta son las que me dicen de lo complicado que es fotografiar.

    No sé si algunos recordareis la frase de Winogrand de que las mejores fotografías siempre están al borde del desastre.
    En esta hay un montón de cosas que podrían no funcionar, como que el personaje esté tan encajonado en el encuadre, o el fondo hubiera estado desierto, o que el gesto o el aspecto de los personajes reflejara una situación irrelevante. En cambio todo funciona admirablemente bien aunque no debería. Conseguir lo que decía Winogrand debe de ser de lo más difícil en fotografía, y te obliga a picar piedra una y otra vez, a menudo con muy poco éxito, me temo.

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    • Hola Gerard! Una vez más lo has sintetizado muy bien. :) Las fotografías que más me gustan de un tiempo a esta parte son esas en las que todo podría estar “mal” y sin embargo (quizás más el conjunto que lo individual) funciona sorprendentemente bien. Creo que por eso me gusta (nos gusta) tanto Hara. No? ;)

      Jota.

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  4. A todo lo dicho le sumo otro detalle fantástico de la foto. El cartel de forma sinuosa con el texto “Balmoral” hace que cuando nuestra mirada se desplaza hasta el extremo superior derecho de la imagen, el cartel nos lleva suavemente (al ser sinuoso y no recto) hacia los hombres caminando, y de ahi la imagen nos vuelve a desplazar hacia el buzón (centro de la foto) y de nuevo hacia el hombre. Nada, era un detalle que me pareció interesante compartir ya que fue una de las sensaciones que me produjo esa foto. Saludos

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  5. Tengo un libro del autor, que es una maravilla.

    Para mí hay otra cosa que puede parecer ridícula pero que se olvida a menudo en la composición, y es la fuerza del formato. El ojo humano es más dado a la horizontalidad, y en este sentido me parece mejor (salvo excepciones) el formato 3:2. Y no confundir el formato con el recorte, porque tampoco es lo mismo: una micro 4/3 puede disparar a 3:2, pero en realidad está recortando un 4:3 quitándole un trocito arriba y abajo, pero sin añadir nada en la horizontal… vamos, que no es realmente un 3:2.

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